UNIDAD PARA LA IMPLEMENTACION DEL ACUERDO DE PAZ

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NUESTRA DIRECTORA

La activista por la paz, trabajadora social, magíster en geografía y ex alcaldesa de Apartadó, Gloria Isabel Cuartas Montoya, quien también es premio mundial de derechos humanos de Nantes (Francia 2008), premio mundial de alcaldes por la paz (1996), y designada por la UNESCO como una de las 60 mujeres más importantes del mundo que trabajan por la paz (2007), entre otras prestigiosas menciones, fue nombrada directora de la Unidad de Implementación del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera.

Así lo establece el Decreto 0065 del 20 de enero del 2023, suscrito por la ministra delegataria Gloria Inés Ramírez, con el cual Cuartas tomó posesión del cargo para liderar la tarea de asesorar, articular y coordinar las líneas de política, programas, planes, acciones, apoyos y seguimientos a la implementación del Acuerdo Final de Paz.

 

 la construcción del tejido social. A partir del trabajo con comunidades afectadas por desastres naturales y el conflicto armado se destacó como una luchadora incansable en la defensa de los derechos humanos. Nacida en Sabaneta, Antioquia, Gloria Isabel Cuartas Montoya es una mujer sencilla y amante de la vida, que demostró desde muy temprana edad su interés por aportar a

 

PALABRAS DE LA DIRECTORA

La geografía de la vida y la esperanza, el reto de la Unidad de Implementación del Acuerdo Final de Paz

En un largo trasegar de lucha por el respeto de la vida, la defensa de los derechos humanos y la búsqueda de la paz, ahora que la vida me permite liderar la Unidad de Implementación del Acuerdo de Paz -UIAP-, tomo como bandera las recomendaciones del informe final de la Comisión de la Verdad, con el fin de aportar a la construcción de la geografía de la vida y la esperanza centrada en dos puntos, el primero, una geografía para acelerar la implementación del Acuerdo, para lo cual pondremos a disposición de las entidades responsables de la búsqueda de personas desaparecidas, de la ubicación y desactivación de minas antipersonal y de la reforma rural integral, la información catastral de los predios rurales en Colombia.

Esto significa saber de quién es el predio donde encontraron o puede encontrarse el cuerpo de un ser querido; qué territorios pueden limpiarse para quedar libres de artefactos explosivos que mutilen los sueños y esperanzas de campesinos, niños y niñas, jóvenes, mujeres y hombres, y democratizar parte de la información catastral para focalizar la atención sobre los predios rurales que requieren especial atención, teniendo en cuenta los enfoques de género, territorial y etario.

Segundo, una geografía que muestre dónde se están ejecutando los recursos para la implementación del Acuerdo de Paz, como apuesta institucional de la UIAP para visibilizar las obras que se están ejecutando en los territorios, y permitir que la ciudadanía, los entes de control y los organismos internacionales pueden visualizar a dónde estamos llegando.

Esta apuesta ética, transparente y de acción que democratiza la información para los campesinos y campesinas de Colombia, es un paso enorme para acelerar la implementación del Acuerdo de Paz, y al tiempo, para aportar a las garantías de no repetición.

Hago este planteamiento con los años de experiencia que inicié desde que era alcaldesa del municipio de Apartadó, cuando emprendí una lucha decidida por la paz y me percataba de la importancia de la geografía, la cual decidí estudiar para complementar mis conocimientos en trabajo social.

La geografía me llevó a hacer la reflexión sobre el tiempo y el espacio en las políticas públicas, cómo toda política se espacializa y transforma a favor o en contra a las comunidades. Por este motivo, aliento a mi equipo de trabajo, a las entidades aliadas, a las comunidades, a los organizamos de cooperación internacional, a toda la sociedad, para que tengan presente que ¡en la implementación del Acuerdo Final de Paz el lugar cuenta! Y lo que realicemos debe dejar una marca que impacte positivamente en los territorios, en la memoria, e instale una geografía para la vida, una geografía de la esperanza.